Espasmo esofágico
Los espasmos esofágicos son contracciones musculares dolorosas que afectan el esófago, el conducto que lleva el alimento desde la boca hasta el estómago.
Clasificación
Signos y síntomas
Los espasmos esofágicos pueden parecerse a un dolor torácico repentino e intenso que dura desde unos pocos minutos hasta unas pocas horas.
Los espasmos esofágicos generalmente ocurren sólo ocasionalmente. Pero para algunas personas, las contracciones musculares son comunes y pueden impedir que los alimentos y los líquidos pasen a través del esófago.
Los síntomas del espasmo esofágico pueden ser aterradores, ya que tienden a aparecer muy rápidamente. Un espasmo severo causa inmediatamente dolor y opresión en el pecho, lo cual puede parecerse a la sensación de un ataque cardíaco inminente. Una persona puede ser incapaz de tragar durante y poco después de un espasmo y los alimentos pueden regurgitar en la boca. Unos minutos después del ataque, usted puede sentir como si un objeto se le hubiera atascado en la garganta.
Una persona con un solo espasmo esofágico probablemente no necesita ver a un médico a menos que el dolor y la dificultad para tragar persistan por más de unos pocos minutos. Si los problemas esofágicos se vuelven más frecuentes, por lo general es mejor hacer una cita con su médico. El médico puede hacerle preguntas acerca de sus síntomas y realizar un examen físico completo para tratar de identificar la causa de los espasmos. Se pueden necesitar exámenes adicionales, como radiografías y endoscopias, si los espasmos y la acidez estomacal son enfermedades crónicas.
Causas
No está claro qué causa exactamente el espasmo esofágico, pero se han identificado varios factores de riesgo. Los espasmos leves ocasionales son más probables de ocurrir cuando una persona experimenta acidez estomacal aguda o presión arterial alta. Los alimentos o bebidas calientes o frías pueden causar espasmos repentinos cuando entran en contacto con los músculos esofágicos de la garganta.
Muchas personas con espasmos esofágicos crónicos también sufren de enfermedad de reflujo gastroesofágico (ERGE), una condición que frecuentemente causa acidez estomacal, dolor en el pecho y regurgitación de alimentos. También hay evidencia que sugiere que algunos casos de espasmos esofágicos están relacionados con problemas nerviosos en el área de la garganta.
Tratamiento
El tratamiento de los espasmos esofágicos ocasionales puede no ser necesario. Pero si los espasmos esofágicos interfieren con su capacidad para comer o beber, hay tratamientos disponibles.
No es necesario evitar los desencadenantes de espasmos leves, pero un caso crónico debe ser evaluado y tratado por un médico. El médico puede sugerir medicamentos, una dieta y estilo de vida y, algunas veces, cirugía para ayudar a prevenir futuros espasmos esofágicos.
La mayoría de los médicos aconsejan a sus pacientes que aprendan qué desencadena sus espasmos ocasionales y que tomen medidas para evitarlos. Los cambios simples en el estilo de vida, como dejar que el café se enfríe o evitar el helado frío, son suficientes para prevenir futuros espasmos en muchas personas.
Si los problemas esofágicos están relacionados con la acidez estomacal, el médico puede sugerirle que evite los alimentos picantes, haga más ejercicio y tome reductores de ácido durante los episodios.
Una persona con espasmos crónicos y ERGE puede necesitar tomar medicamentos recetados diariamente. En casos muy graves, la cirugía para relajar y relajar los músculos esofágicos puede ser la mejor opción terapéutica.