Disgrafía

Etimología

    Disgrafía: De dis-, prefijo que indica anomalía, del latín dis-, del griego antiguo δυσ- (dus-, “difícil, malo”) + -γράφω (-graphía), de la raíz de γράφειν (gráphein, “escribir”).

La disgrafía es una dificultad de aprendizaje que afecta principalmente a la escritura. A menudo se descubre en la primera infancia durante las primeras clases de lectura y escritura. Las personas con disgrafía a menudo sufren de una falta de habilidades motoras y también pueden tener dificultades para realizar otras tareas motoras. En algunos casos de adultos, la afección es el resultado de un traumatismo craneal.

Signos y síntomas

Algunos de los signos principales de la disgrafía incluyen la confusión entre mayúsculas y minúsculas, espacios demasiado grandes o estrechos entre letras y palabras, y la escritura de letras posteriores o letras que parecen similares, como “b” y “d.”, que son confusas. Las personas con esta afección pueden tener excelentes habilidades verbales y de lectura, pero las palabras no se pueden escribir sin una alta concentración.

Los niños y adultos con la enfermedad generalmente tienen una ortografía muy pobre y a veces no entienden la puntuación. Su escritura suele ser de mala a ilegible y a menudo empeora si tiene prisa o si no se concentra cuidadosamente en la escritura. La disgrafía puede ser extremadamente frustrante, ya que los problemas motores rara vez están relacionados con la inteligencia o la comprensión.

Tratamiento

Existen varios métodos para tratar la disgrafía, tanto dentro como fuera del aula. Aunque las personas con esta afección deben practicar continuamente sus habilidades para ayudar a mejorar la legibilidad, se deben hacer algunos suplementos para este impedimento. Si usted es un maestro con una compañía de discos estudiantiles, tenga en cuenta lo que les da más tiempo para hacer su tarea escrita o les permite dictar sus respuestas. Algunas personas con esta afección son capaces de escribir mucho mejor de lo que pueden hacerlo a mano, por lo que es una buena idea permitir que los estudiantes usen una computadora para hacer la tarea o escribir ensayos de tiempo limitado.

Relación con el Trastorno de Déficit de Atención (TDAH)

La disgrafía puede ser un síntoma de otras afecciones y los niños que muestran signos deben ser monitoreados para detectar otros problemas. Según algunos expertos, la afección puede ser un indicador del trastorno de déficit de atención (TDA) o de discapacidades asociadas con la hiperactividad. Aunque las personas con disgrafía generalmente tienen dificultad para poner letras o palabras en secuencia, también pueden tener un mayor problema de concentración. Si un niño tiene síntomas consistentes con el trastorno por déficit de atención además de problemas de disgrafía, puede querer ver a un médico o terapeuta.

A medida que la ciencia mejora su comprensión del cerebro humano, queda claro que el aprendizaje se produce de diversas maneras, específicas para cada individuo. El desafortunado problema de la educación masiva es que los estudiantes deben ajustarse a una táctica particular de aprendizaje para tener éxito en la escuela. Es importante entender y educar a los niños para que sepan que una persona no es “estúpida” o “retrasada” si tiene problemas de aprendizaje. Pueden ser tan capaces de inteligencia y comprensión como cualquier otra persona, pero deben encontrar su propia manera de comunicar sus pensamientos.