Hiperplasia ductal atípica
La hiperplasia ductal atípica es una enfermedad en la cual las células que recubren los conductos galactóforos de las mamas crecen de manera anormal.
Esta afección no es cancerosa, pero puede indicar un mayor riesgo de cáncer en las mujeres. Como resultado, los profesionales de la salud a menudo recomiendan un control y seguimiento cuidadosos en pacientes que han desarrollado esta afección en uno o ambos senos.
Causas
El término hiperplasia se utiliza para describir cualquier aumento en el número de células en una región determinada. Un número de cosas pueden causarlo, y la condición es a menudo tan leve que la gente ni siquiera se da cuenta. En otros casos, la hiperplasia causa desplazamiento de órganos, dolor y otros síntomas que la hacen visible. En el caso de la hiperplasia ductal atípica, la afección generalmente se diagnostica durante las mamografías de rutina.
Diagnóstico
Durante una mamografía, esta forma de hiperplasia toma la forma de un pequeño depósito alrededor del canal de la leche. Un profesional de la salud generalmente le pedirá que realice una biopsia del área para descartar la posibilidad de un tumor maligno. Cuando la biopsia confirma que el paciente tiene hiperplasia atípica del conducto radicular, el profesional de la salud puede discutir varias opciones con el paciente.
Tratamiento
Debido a que esta afección no es cancerosa, no requiere tratamiento. Sin embargo, los profesionales de la salud a menudo recomiendan que sus pacientes monitoreen cuidadosamente sus senos mensualmente a través del autoexamen de senos, y se puede animar a las pacientes a hacerse exámenes clínicos de senos y mamografías de manera más regular. Al estar atentos, los signos de cáncer de mama se pueden detectar a tiempo, si aparecen.
Algunas mujeres eligen tomar medicamentos profilácticos si desarrollan hiperplasia ductal atípica, especialmente si los miembros de la familia tienen antecedentes de cáncer. Estos medicamentos pueden ayudar a reducir el riesgo de cáncer de mama. Más radicalmente, una mujer puede optar por una mastectomía preventiva. Esta decisión no debe tomarse a la ligera y por lo general sólo se considera cuando una mujer tiene un fuerte historial familiar de cáncer de mama, así como otros factores de riesgo que aumentan la probabilidad de desarrollarla.
Al someterse a autoexámenes regulares de los senos y a las pruebas de detección recomendadas, como las mamografías, las mujeres pueden identificar la hiperplasia y otros problemas de salud tempranos y tomar decisiones proactivas sobre su salud. Las mujeres deben hablar con sus médicos sobre los exámenes preventivos recomendados.